03 diciembre, 2014

MANIPULAR!

Que queda claro que todos manipulamos, cada día!
Nuestra influencia sobre otras personas es inevitable y innegable.

Una fuente de manipulación constante es, nuestros hijos. Aquí tenemos la oportunidad de practicar la manipulación en la perfección.
Evidentemente con fines nobles, utilizando la educación como gran herramienta, para ayudar a nuestros hijos en transformarse en personas adultas.

Pero, hay que vigilar con la manipulación. No es tan fácil como parece, ni tan blanco y negro. Hay que estar muy atentos para que no la utilizamos de forma no tan noble, como conseguir y cumplir propósitos y objetivos propios.

Esto realmente no tiene nada que ver con la enseñanza, ni con la educación y menos "querer lo mejor para los hijos!" Por más que esto será justo la excusa que pongamos. Pues no, en este caso, solo estaríamos ejerciendo nuestro “derecho de uso” sobre nuestros hijos. Es tan fácil como meterlos algo en la cabeza y hacerles creer, que esto es “la gran verdad...”. ¿Como no nos van a creer? Al fin y cabo, somos sus héroes...

Si es una práctica continua como padres, la manipulación egoísta, estoy convencida que algún día todo saldrá a la luz y los niños, nuestros hijos, ya adolescentes o adultos, se darán cuenta. Cuando llega este día, nosotros ya no somos sus héroes... ¿Entonces que? Probablemente tendremos que tragar las consecuencias, que será todo, menos algo positivo.


No hay comentarios: